Ayuda. Ya no quiero casarme
Hola chicas,
Voy para cinco años de relación con mi novio, y hace un año me pidió que nos casáramos, ya que siempre había estado en nuestros planes. Tardamos meses en ponernos a buscar sitio para la boda, sobre todo porque estábamos pasando un momento malo en cuanto a la relación con mi familia.
Mi madre, y mi familia en general, es muy cerrada y nunca han acabado de ver bien mi relación (pero yo creo que tampoco la verían bien con otra persona). Mi madre es muy posesiva y controladora, y aunque tengo 27 años, siempre opina de todo lo que hago. No le gusta mi pareja, pero yo creo que en realidad lo que no le gusta es que sea independiente y haga mi vida algo lejos de mi pueblo natal. Ha habido épocas en que este malestar se ha disimulado y otras en las que mi novio no ha podido ni pisar la casa de mis padres. A todo ello, nosotros llevamos casi 3 años viviendo juntos, nos queremos y estamos bien.
Pues bien. La boda decidimos organizarla para primavera del año que viene, cuando por fin me animé a dar ese paso en gran medida por la insistencia de mi novio que es tradicional y quería una boda convencional. Yo quería algo más íntimo. De hecho, yo insistía en casarnos de viaje, ya que nos encanta viajar, en algún lugar exótico, porque no me gusta ser el centro de atención y sabía que en mi entorno no era algo que les hiciera ilusión alguna.
A todo ello tengo que decir que lo primero que me dijo mi madre cuando le conté que me había pedido de casarnos (estábamos en mala racha con ella) fue que no vendría a la boda. Yo me quedé en casa llorando y sin querer hacer nada varios días.
Desde que reservamos fecha a principios de año y pagamos la señal del sitio, no hemos hecho mucho más ya que hemos estado centrados en el día a día (hemos cambiado de trabajo, hemos viajado y nos hemos comprado un piso al que nos mudamos en breve). O sea, que a mí no me importa "comprometerme" con él con una hipoteca y demás, de hecho estoy muy contenta por lo que a nuestro nuevo piso respecta. A todo ello, mi madre ha intentado maquillar un poco las discrepancias en presencia de mi pareja, pero a mí me ha insinuado muchas veces qué por qué me caso, que no van a venir ni mis padres ni mis abuelos, que me voy a casar sola... El último a decirme eso fue mi padre, ya que pensaba que yo me posicionaba a favor de mis tíos en una discrepancia que tienen y me dijo: "haces eso para que tus tíos vengan a la boda, pero entonces el que no va a venir voy a ser yo".
Ahora veo que me tengo que poner a organizar la boda más en detalle, y en consecuencia a invertir más dinero en reservas de fotógrafo, música, etc. Pero no me siento con ganas ni ilusión alguna. Yo no tenía esa necesidad de montar un bodorrio con tantos invitados. Me dejé llevar por lo que es convencional y la ilusión de mi novio y ahora me arrepiento. Si tuviera apoyo familiar tal vez estaría más animada (dicen que las bodas son para darle un buen día a la familia), pero yo me veo con una familia que me da la espalda, que me trata mal, a mí y a mi pareja, y con una lista de invitados con amigos a los que aprecio pero tampoco tanto como regalar ese pedacito de intimidad. Siento que todo va a salir mal si sigo adelante, me siento como oprimida porque la boda me parece más bien un peaje por el cual tengo que pasar para "mantener" mi relación de pareja. Pero la realidad es que yo no lo necesitaba, yo estaba bien así, o haciendo una pequeña boda en la intimidad más adelante en algún sitio con padres, hermanos y abuelos y luego una ceremonia exótica en el extranjero.
Se lo he comentado a él, pero no lo acepta. Cree que cambiaré de opinión cuando me tranquilice tras los últimos conflictos con mi familia, pero la realidad es que yo creo que es un sentimiento de opresión más profundo y llevo tiempo con esto dentro, pero como la boda estaba lejos no salía a la luz. Me da miedo que esto pueda suponer una ruptura en la pareja o una herida profunda, pero creo que con 27 no debo casarme sin desearlo de verdad. Y además, a mí no me importa el casarme, me importa el cómo. No soy una persona especialmente sociable, y si encima mi situación familiar no es buena, ya es un cóctel insuperable. Necesito consejos. Llevo mucho tiempo aguantando la relación con mi familia, a pesar de críticas e insultos, para intentar mantener la apariencia de familia feliz en la boda y NO puedo más. Necesito ser libre para no volver a suplicar su cariño por tener un día de princesa que no necesito.
Perdonad el rollo, pero necesito vuestro punto de vista.
Gracias!
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Hola chicas,
Voy para cinco años de relación con mi novio, y hace un año me pidió que nos casáramos, ya que siempre había estado en nuestros planes. Tardamos meses en ponernos a buscar sitio para la boda, sobre todo porque estábamos pasando un momento malo en cuanto a la relación con mi familia.
Mi madre, y mi familia en general, es muy cerrada y nunca han acabado de ver bien mi relación (pero yo creo que tampoco la verían bien con otra persona). Mi madre es muy posesiva y controladora, y aunque tengo 27 años, siempre opina de todo lo que hago. No le gusta mi pareja, pero yo creo que en realidad lo que no le gusta es que sea independiente y haga mi vida algo lejos de mi pueblo natal. Ha habido épocas en que este malestar se ha disimulado y otras en las que mi novio no ha podido ni pisar la casa de mis padres. A todo ello, nosotros llevamos casi 3 años viviendo juntos, nos queremos y estamos bien.
Pues bien. La boda decidimos organizarla para primavera del año que viene, cuando por fin me animé a dar ese paso en gran medida por la insistencia de mi novio que es tradicional y quería una boda convencional. Yo quería algo más íntimo. De hecho, yo insistía en casarnos de viaje, ya que nos encanta viajar, en algún lugar exótico, porque no me gusta ser el centro de atención y sabía que en mi entorno no era algo que les hiciera ilusión alguna.
A todo ello tengo que decir que lo primero que me dijo mi madre cuando le conté que me había pedido de casarnos (estábamos en mala racha con ella) fue que no vendría a la boda. Yo me quedé en casa llorando y sin querer hacer nada varios días.
Desde que reservamos fecha a principios de año y pagamos la señal del sitio, no hemos hecho mucho más ya que hemos estado centrados en el día a día (hemos cambiado de trabajo, hemos viajado y nos hemos comprado un piso al que nos mudamos en breve). O sea, que a mí no me importa "comprometerme" con él con una hipoteca y demás, de hecho estoy muy contenta por lo que a nuestro nuevo piso respecta. A todo ello, mi madre ha intentado maquillar un poco las discrepancias en presencia de mi pareja, pero a mí me ha insinuado muchas veces qué por qué me caso, que no van a venir ni mis padres ni mis abuelos, que me voy a casar sola... El último a decirme eso fue mi padre, ya que pensaba que yo me posicionaba a favor de mis tíos en una discrepancia que tienen y me dijo: "haces eso para que tus tíos vengan a la boda, pero entonces el que no va a venir voy a ser yo".
Ahora veo que me tengo que poner a organizar la boda más en detalle, y en consecuencia a invertir más dinero en reservas de fotógrafo, música, etc. Pero no me siento con ganas ni ilusión alguna. Yo no tenía esa necesidad de montar un bodorrio con tantos invitados. Me dejé llevar por lo que es convencional y la ilusión de mi novio y ahora me arrepiento. Si tuviera apoyo familiar tal vez estaría más animada (dicen que las bodas son para darle un buen día a la familia), pero yo me veo con una familia que me da la espalda, que me trata mal, a mí y a mi pareja, y con una lista de invitados con amigos a los que aprecio pero tampoco tanto como regalar ese pedacito de intimidad. Siento que todo va a salir mal si sigo adelante, me siento como oprimida porque la boda me parece más bien un peaje por el cual tengo que pasar para "mantener" mi relación de pareja. Pero la realidad es que yo no lo necesitaba, yo estaba bien así, o haciendo una pequeña boda en la intimidad más adelante en algún sitio con padres, hermanos y abuelos y luego una ceremonia exótica en el extranjero.
Se lo he comentado a él, pero no lo acepta. Cree que cambiaré de opinión cuando me tranquilice tras los últimos conflictos con mi familia, pero la realidad es que yo creo que es un sentimiento de opresión más profundo y llevo tiempo con esto dentro, pero como la boda estaba lejos no salía a la luz. Me da miedo que esto pueda suponer una ruptura en la pareja o una herida profunda, pero creo que con 27 no debo casarme sin desearlo de verdad. Y además, a mí no me importa el casarme, me importa el cómo. No soy una persona especialmente sociable, y si encima mi situación familiar no es buena, ya es un cóctel insuperable. Necesito consejos. Llevo mucho tiempo aguantando la relación con mi familia, a pesar de críticas e insultos, para intentar mantener la apariencia de familia feliz en la boda y NO puedo más. Necesito ser libre para no volver a suplicar su cariño por tener un día de princesa que no necesito.
Perdonad el rollo, pero necesito vuestro punto de vista.
Gracias!
Ustedes ya viven juntos. La boda es una celebración para ustedes dos. No la hagas para nadie más. Es un reflejo de cómo será tu vida en pareja. ¿Tu cediendo para complacer? ¿Y tú qué? También te mereces una pequeña boda en la intimidad, más adelante en algún sitio con padres, hermanos y abuelos y luego una ceremonia exótica en el extranjero. Te lo mereces porque es una vez en la vida. Tu estás dispuesta a hacerla como quiere tu pereja y ¿ha habido alguna ruptura? ¿por qué debe haber ruptura si él cede en hacerla como AMBOS decidan? Sé acertiva. Te deseo mucho valor y mucha felicidad.